Este
día 26, fui al Parque de Cabárceno, lo que sería la primera visita del año.
Quería
hacer un inventario de los animales existentes del Parque, tarea muy difícil y
más aún al encontrarme con varios
recintos sin ningún animal, bien por estar en obras o bien por no haberles
sacado de sus hábitat, por tanto, no pude conseguirlo.
Pero
al menos, pude hacer muchas fotos de todos los animales que vi y se dejaron
fotografiar.
Publico
solamente aquellos que considero mis favoritos, más el "tigre" como
una oportunidad que me dieron.
A
veces el Parque no es todo los animales, también es su enclave singular
transformado por la reforestación y la erosión kárstica, existiendo unos
rincones preciosos al paso del vehículo.
Ese
día lo he dedicado más bien a los "tigres de bengala" y en esta
ocasión, se encontraban fuera los cinco,
Liso, Neu, Pluja, Rayo y Rota.
Estos
cinco conviven hoy sin problemas, a pesar de ser animales solitarios y muy territoriales,
su poderosos instinto de dominancia está latente en ellos y aún pueden
sorprender con ataques feroces que siempre acaban en muerte.
El
Parque ya tiene experiencia, pues hace años, tuvieron una pérdida importante de
algunos tigres que se atacaron entre ellos ocasionando la muerte cinco tigres.
Esta
manada de tres hembras y dos machos llegaron del Parque de Benidorm en el 2017
y durante estos años, han crecido de tal manera que nada más verlos impresiona.
También
están, la hembra Paché y el marcho Larios, los dos supervivientes de los viejos
enfrentamientos, más Candi, que es hija de ambos, pero se encuentran apartadas
y no salen al recinto grande.
Y
también pudiéremos hablar de la tigresa
blanca Kaya, que años no se la ve y se desconoce si está encerrada o bien se la
han llevado a otro Parque.
El
espacio que disponen estos tigres es muy grande y pudiera ser de los más
grandes de Europa.
Desde
el Parque están alertas y controlan todos los movimientos de estos tigres, pues
pueden ocasionar problemas, ya que son animales que no perdonan, si se pelean,
no dejan al otro herido, lo matan, como bien dice el veterinario jefe, Santiago
Borragán.
