17 de noviembre de 2013

COVALAGUA



 

 

 

 






 



 


Nuevamente salimos de ruta fotográfica este 13 de noviembre, para buscar cualquier paisaje o detalle que nos de este otoño.
Ahora ya solamente somos cuatro, Nacho, Felipe, Manolo y yo, con la intención de llegar a un lugar con sol, dado que en Santander y Campoo  estaba lloviendo.
En carretera, ya veíamos claros por la zona de Aguilar y allí decidimos acercarnos, con la primera visita al pantano y sus alrededores.
En un año de setas, no era extraño de localizarlas, vimos muchísimas de distintas especies e incluso diferentes a las de Valderredible.
En carretera, observábamos algunos árboles con color, pero no lo suficiente para darnos cuenta que no era el día acertado.
Directamente nos fuimos a comer a Aguilar de Campoo, al restaurante Los Olmos, por elección de Nacho, para degustar una vez más, unas alubias blancas (Felipe, todavía no ha terminado con las que compro en Ruerrero) y si acertamos, con el menú,  en un sitio de "camioneros".
Ya por la tarde, nos fuimos a ver las cuevas de los Franceses, con la desilusión de encontrarse cerradas y después acercarnos al mirador del Valle del Ebro, que tampoco podíamos ver mucho, estaba totalmente cubierto de niebla.
Pero quedaba lo mejor, nos acercamos al bosque de Covalagua, sitio privilegiado y precioso. Nos quedamos sorprendidos al encontrarnos  con un bonito bosque con los colores de otoño, amarillos, rojizos, hojas caídas, árboles singulares. Un sitio espectacular y que tenemos que señalar en nuestras agendas para próximas visitas.
La excursión la hemos realizado en la provincia de Palencia, aunque el día no fue bueno, si nos ha servido de experiencia, pues nos hemos dado cuenta que tenemos una ruta para recomendar, que consiste en visitar los pueblos de Pomar y Revilla, acercarse a la Cueva de los Franceses y visitar el bosque de Covalagua. También se puede ampliarla con la visita a algunas iglesias románicas que se encuentran por estos lugares.
El espacio natural de Covalagua es uno de los parajes más bellos y emblemáticos de la comarca palentina, habiéndose solicitado ser declarado Monumento Natural por la Junta de Castilla y León.
Se encuentra situado en el término municipal de Pomar de Valdivia, con tres núcleos de población: Pomar de Valdivia, Respenda de Aguilar y Revilla de Pomar, en la provincia de Palencia, comunidad autónoma de Castilla y León.
Covalagua es una cueva donde nace el Río Ivia, donde el agua circula lentamente sobre la toba que ha ido depositando el río, en forma de peldaños semicirculares, creando pequeñas cascadas entre uno y otro peldaño, hasta a la balsa reguladora, rodeado de una reserva de corzos. Espectacular
Este entorno constituye una paisaje de típico relieve mesozoico, caracterizado por elevaciones de paredes verticales, coronadas por una meseta más o menos llana, aisladas en una vasta región donde predomina la horizontalidad. Una maravilla.
Es un singular sitio que se mezclan especies arbóreas de carácter atlántico y mediterráneo. Predominan las hayas , acompañadas por quejigos, una especie muy común. Interesante.
Numerosas son las especies que crecen en este bosque. Tejos, acebos, rosales silvestres, encinas, majuelos, endrinos, robles melojos y avellanos, tienen una presencia puntual entre el hayedo-quejigar. Alrededor del entorno de Covalagua se localizan pequeños rodales de pinares, constituidos por el pino silvestre, el pino insigne y el pino laricio.
Pequeñas plantas como la aguileña, el torvisco macho y el poligonato, surgen entre el bosque y junto a los arroyos. Tapizando el suelo aparecen, ampliamente distribuidos, matorrales de pinchuda aulaga y brezos.
La situación biogeográfica de Covalagua, en una zona de influencias mediterránea y eurosiberiana, condiciona la presencia de una variada gama de especies faunísticas.
Entre los mamíferos se destacan el ciervo, el jabalí, el zorro y el lobo, otros de menor tamaño que también conviven, es el gato montés, la marta, la garduña, la comadreja, la gineta, el concejo y la liebre.
En esta la zona de La Lora, es especialmente rica desde el punto de vista ornitológico. Especies de tendencias rupícolas como el águila real, el buitre leonado, el búho real, el alimoche, el vencejo real, la chova piquirroja, el halcón peregrino o el cuervo, anidan en los cantiles y paredes rocosas de este espacio.
En la carretera en dirección a Burgos, existe la valiosa cueva de Los Franceses, de formación kárstica. Para su visita se recomienda informarse del día y las horas.
Tras la visita de las cueva, hay que dirigirse hacia el Este por una pista que termina en un balcón o mirador al valle del Ebro con un impresionante tajo en la montaña de más de 1000 m., que desemboca en bosques de hayas seguido de praderas con pueblecitos, entre los que destaca Villanueva de la Nía, junto el Ebro. Procurar visitar este mirador en un día despejado.
En el valle que se contempla desde el mirador, existen pueblos  con iglesias rupestres y románicas, como son la de San Martín de Vadelomar, Castrillo de Valdelomar, Cezura, Villanueva de la Nia....
Para acercarnos a estos lugares, debemos acercarnos a Revilla de Pomar, que corresponde a una pedanía del municipio de Pomar de Valdivia, ya en el norte de la provincia de Palencia, con una paisaje de transición entre la montaña y la meseta. En esta zona la orografía y el clima son más suaves que en el resto de la montaña palentina.
El pueblo está situado junto al rio Ivia, a 1.045 m. de altitud y está rodeado por bellos paisajes y muchos atractivos turísticos, como el Páramo de la Lora, la Cueva de los Franceses, el parque natural de Covalagua, la pétrea monumentalidad de Las Tuerces, el cañón de La Horadada por el que discurre el río Pisuerga, el menhir megalítico de Canto Hito, el Mirador de Valcabado y el antiguo y restaurado Pozo de los Lobos.
Este pueblecito está situado estratégicamente para hacer rutas turísticas, culturales y otras actividades como senderismo.
Pero lo importante, es que permite cómodas visitas a ermitas rupestres y a la joyas del románico que la provincia de Palencia atesora, una de las mayores riqueza del mundo en este patrimonio artístico.
Otro pueblo, Pomar de Valdivia, muy cerca y con una situación privilegiada para recorrer maravillosos parajes y una relación de pueblecitos como son Báscones de Valdivia, Camesa, Cezura, Helecha, Lastrilla, Pomar, Porquera de los Infantes, Quintanilla de las Torres, Rebolledo de la Inera, Respenda de Aguilar, Revilla de Pomar, Villaescusa de las Torres, Villallano y Villarén.
Este pueblo que es Ayuntamiento, posee belleza, tranquilidad y buena gente. Además de aquí procede Nacho.
Personalmente he conocido una ruta que me ha encantado, páramos, bosques, arboles, setas, pueblecitos...., todo gracias a nuestro amigo Nacho, quien mejor que él para guiarnos por unas tierras que él conoce perfectamente.


 
 
 
 
 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy, muy bonitas,me encantan.
Es un paisaje invernal que parece sacado de un cuento.