Otros
insectos o "bichos" de ese dia.
las
MARIPOSAS
Volví de
nuevo a Morero, para continuar con mis fotografías de "macro" y
localizar algo más de lo que conseguí en la anterior visita.
No sé las
circunstancias, pero sigo sin ver las "libélulas" que de siempre existían
en este lugar, uno de los objetivos preferidos por mí.
Lo que si he
visto "arañas" y bastante "mariposas", para poder entretenerme
y fotografiarlas.
Si me encontré
de nuevo con los "opiliones", que no tienen que ver nada con las
arañas.
Tendré que
dejar un tiempo para volver de nuevo y poder encontrarme con otros
invertebrados distintos a los que esta vez he localizado.
Opiliones
El martes 22
de agosto, me fui a Astillero, concretamente al lugar de Morero, para continuar
con las fotografías de "macro".
Un entorno
de naturaleza, en donde siempre existe posibilidades de encontrarse lo que yo voy
buscando.
De la última
visita, el paisaje ha cambiado, mucha vegetación y pocos "bichos".
En esta
ocasión, he localizado por primera vez, un insecto conocido como "opilión",
que ha sido una sorpresa, pero con dificultades para fotografiarle, por su tamaño.
Además de
otros como el escarabajo, la avispa, el caracol y una libélula roja.
Si me ha
sorprendido no encontrarme con más libélulas e incluso de otras especies, no va
a ser el año de ellas.
Los opiliones, con conocidos vulgarmente como
arañas patonas, morgaños o segadores, son un orden de arácnidos totalmente
inofensivo.
Debido a que la disposición de sus
quelíceros, una especie de "colmillos" situados antes de la boca que
usan para agarrar el alimento, acaban en forma de pinza y no de navaja como en
las arañas, los opiliones no pueden "picar".
Además, tampoco poseen ningún tipo de
glándula venenosa asociada a ellos, como las arañas.
El opistosoma (el abdomen) de los opiliones
tienen dos partes del cuerpo fusionadas y su anatomía forma un todo globoso.
Si en el cuerpo de las arañas se distinguen
claramente dos partes, en el de los opiliones se ve una sola pieza. Además, las
arañas pueden tener tres o cuatro pares de ojos, los opiliones, por su parte,
solo tienen un par de ojos situados en la parte superior del cefalotórax.
Son amantes de la humedad, suelen vivir en
hojarasca, grietas y cuevas.
Usan sus quelíceros para limpiar su patas y,
en el caso de tener que defenderse de depredadores, pueden soltarlas como
maniobra de distracción.
A diferencia del resto de arácnidos, los
machos de opilión están dotados de un órgano copulador y practican la
fecundación interna.
En algunas especies, los machos usan sus
quelíceros para ofrecer una secreción oral a las hembras como regalo nupcial,
para cortejarlas.
Cuando se trata de reproducirse, dejan de ser
inofensivos y pasan a pelearse entre machos para acceder a las hembras.
El día 18 de
agosto, me fui como vengo haciéndolo todos los años a la Cantera de Cuchia,
lugar que le tengo elegido para hacer fotografías en "macro".
Mi objetivo,
era localizar cualquier invertebrado o algún "bicho" nuevo para mi
colección de "macrofotografía".
No es fácil,
lo primero es tener suerte y encontrarte con ellos.
Lo segundo, que
las circunstancias sea favorables, es decir, poder acercarte lo más posible al
"bicho" y sin movimiento.
Desde hace
pocos años la Cantera de Cuchia se ha
transformado mucho, encontrándote muchas vallas y mucha vegetación alta, con
dificultades para andar y buscar lo que uno busca.
Desde el
cierre de su cantera en Cuchía, Solvay propietaria de los terrenos, en su
compromiso por la mejora de la biodiversidad llevó a cabo distintas labores de
restauración para promover y conservar los valores naturales que este espacio
ha ido adquiriendo con los años, en particular, mediante la creación de
humedades, la plantación de arbolado autóctono y la gestión de especies
exóticas invasoras, como el plumero.
Actualmente
en la cantera han llegado a inventariar unas 146 especies de aves; 17 de
mamíferos; 7 de anfibios; 5 de reptiles y 22 especies de odonatos; además de
210 especies vegetales.
Han dirigido
el pastoreo con rebaños de caballos, asnos y vacas, en terreno dividido en
distintas parcelas, en las que el pisoteo de los animales y sus excrementos
favorecen la aparición de insectos descomponedores, en la base la cadena
trófica.
Creación de
charcas y restauración de carrizal mediante la eliminación de plumeros y la
plantación de rizonas de carrizo en zonas próximas al agua.
Pero lo más
importante para mí, es seguir viendo las libélulas, los caballitos del diablo,
las arañas, mariposas...............
El día 19 de
julio, visite con mi familia y la pequeña Sofía, la villa de Santillana del
Mar.
De todo es
conocido este maravilloso pueblo de Cantabria y uno de los más bonitos de
España.
El día,
consistía solamente en pasear y mezclarte con los turistas que veranean por
tierras cántabras.
Los de hacer
fotos, es casi imposible, ante tanto visitantes, solamente quedaba por
fotografiar algo que otro detalle o aquello que no apareciese alguna visitante.
Mejor era
dejarlo para más adelante, como es en invierno y con lluvia.