8 de marzo de 2019

PARQUE DE LA NATURALEZA DE CABARCENO 27 de febrero del 2019




















































El 27 de febrero, volví a Cabarceno , con mis amigos Manolo y Felipe, para aumentar el número de visitas al Parque.

Si en mi la última visita, el objetivo fue los guepardos y los elefantes, en esta ocasión, hicimos un amplio recorrido por casi todos los recintos.

En uno de ellos, en donde los watusi, fuimos sorprendidos al coincidir con el nacimiento de un pequeño, hacía una hora, que se había desprendido de la planceta de su madre y pudimos contemplar unas escenas emotivas viendo a su madre con el recién nacido, limpiándole y ayudándole a ponerse en pie.

Fueron minutos gratamente emocionantes y que no siempre tenemos la suerte de llegar a estos momentos especiales.

Los watusi, son grandes bóvidos africanos, están emparentados con nuestras vacas, aunque probablemente estén más relacionados con el uro salvaje, extinto en Europa desde el siglo XVII y con los cebúes asiáticos.

Los watusi viven en semilibertad formando rebaños que son explotados por los nativos para obtener de ellos leche, carne y cuero. Como ganado, en África son insustituibles, pues los intentos de aclimatación de especies europeas han fracasado por su incapacidad de adaptación al clima y enfermedades tropicales.

Su espectacular cornamenta puede llegar a alcanzar los 2 metros de envergadura, aportando a estos animales una imagen de poder y fortaleza.

Después estuvimos visitando a los papiones, con un nuevo "inquilino" de hacia unos días y que la manada están pendientes de él.

Los papiones de Guinea vive en el suelo de la sabana africana, aunque se sube a los árboles para dormir. Forman sociedades complejas y fuertemente jerarquizadas de más de 30 individuos, llegando en ocasiones a los 150. Su organización social se basa en una red dominancias: en el puesto más alto se encuentran los machos adultos, que duermen en las ramas más confortables y con más alimento; seguidos van los machos inmaduras, que no pueden acercase a las hembras salvo que éstas estén fuera del periodo de celo; y a continuación las hembras, que ocupan el puesto más bajo y entre las cuales también una jerarquía muy bien definida.

Los papiones dedican mucho de su tiempo a despiojarse mutualmente. Estos contactos refuerzan la cohesión social del grupo, siendo los machos adultos y las hembra con crías quienes más atención reciben.

Sus enemigos naturales son las grandes águilas, leopardos, guepardos, leones, hienas, licaones, chacales, etc. aunque estos primates tienen un sofisticado sistema de defensa basado en la vigilancia continua.

El papión, en el antiguo Egipto, era considerado un animal sagrado, y como tal fue profusamente representado y momificado.

Aunque esta especie sigue siendo abundante en libertad, la continua transformación de sus hábitats naturales para alimentar a una población humana siempre creciente empieza a causarles problemas de supervivencia.

Nos alegramos cuando visitamos el Parque, de encontrarnos nuevos "inquilinos" esto hace que el Parque aumenten el número de animales , da mucha alegría y más aún conseguir fotos de sus primeros días.

En los elefantes, observamos que siguen con sus diabluras los pequeños elefantitos, solo queda por incorporarse al grupo uno de ellos, que le hemos visto muy recuperado y deseoso de convivir con los otros.

Del otro pequeño, nos preocupa, sigue sin crecer y alimentándose a biberón, va a tardar en salir de la situación.

De los animales restantes, de momento, tenemos a los hipopótamos sin poder hacerles fotos, por estar prohibido el acercamiento a ellos y de las jirafas sin noticias.

Este mes de marzo, nos queda por renovar las tarjetas.