Este
domingo uno de junio, coincidiendo con el Día Infantil de Cantabria, ha sido un
día para recordar o bien histórico, al encontrarnos con una "pasá" de
ganado tudanco desfilando por la ciudad.
Han
sido más de 700 vacas tudancas que desde La Remonta han recorrido hasta
Puertochico, por las calles de San Fernando, Jesús Monasterio, Calvo Sotelo y
Paseo Pereda, para regresar de nuevo al sitio de partida.
Ha
sido espectacular ver tantas vacas recorriendo estas calles, así como a los
ganaderos a buen ritmo, encaramados en sus albarcas, con fajines al cinto y
cachabas para guiarlas.
Los
mugidos y el estruendo de los campanos
sustituyeron al ruido de los coches.
Un
espectáculo campestre que miles de personas han presenciado y contemplado la
belleza de este ganado autóctono.
La
raza de esta vaca autóctona, es fuerte, produce leche rica en grasas, su carne
es magra y sabrosa y sobre todo, requiere pocos cuidados, adaptándose
perfectamente al régimen de semi-libertad en nuestro clima.
No
hace muchas décadas en algunas comarcas, la vaca tudanca era la protagonista de
las labores más penosas, al poseer una extraordinaria fuerza. En la actualidad,
su interés económico no es muy alto, lo que ha llevado a la reducción en las
cabañas ganaderas.
Actualmente
ya son muchos los ganaderos que pretenden subsistir y mantener a este animal
tan ligado a las zonas montañosas de Cantabria, Palencia o León, prevaleciendo
sobre los aspectos puramente económicos, el orgullo y el cariño por estos
animales tan nuestros.
Soy
uno de los que admira y animo a estos ganaderos a que sigan protegiendo a este
animal tudanco, que espero tenga un gran futuro económico y de reivindicación a
la ganadería cántabra.
Han
encabezado el desfile los mastines de Cabezón de la Sal, que nunca faltan a
estas citas ganaderas. Han estado los de Tama, las vacas de Victor Puente de
Ruiseñada, de José Gutierrez de Aguayo, de José Pila de Silió, de Manuela y
Fidel de Pando, de Roberto González de Villanueva de Labarces y muchos más.
En
el recorrido ha habido un pequeño incidente y con heridos leves. Una de las
vacas tudancas se desbocó abandonó la carretera y embistió contra todo lo que
se encontró a su paso.
Esta
"pasá" ha regresado de nuevo a Santander después de 25 años. Recuerdo
aquella fecha y que tanto disfruté viendo las tudancas desfilando por la ciudad
y posteriormente en la campa de la Magdalena.
El
domingo he vuelto a disfrutar mucho viéndolas y disparando fotos para tenerlas
como un bonito recuerdo.
Foto que hice en la anterior "pasá" hace más de 25 años.