5 de abril de 2019

PARQUE DE LA NATURALEZA DE CABARCENO 28 marzo 2019 (I)























El día 28 de marzo, me fui a recoger la renovación de mi Tarjeta Amigo para continuar visitando el Parque durante este año.

Cuando entras al Parque, no sabes por dónde y a quien de los animales quieres ver.

Para fotografiarles, hay que tener suerte y encontrarles en situaciones ideas para conseguir esa foto que tanto esperamos.

Este día, elegí a unos animales, que últimamente no les tenía como objetivo, como son los linces y las avestruces.


La próxima vez, espero que hayan llegado como nuevos inquilinos las jirafas.











FRAGATA SHTANDART visita del 11 al 24 marzo 2019


























Desde el 11 de marzo al 24, nos ha visitado la fragata rusa "SHTANDART" que ha estado fondeado en el muelle de Gamazo, procedente de La Rochelle.

A bordo 32 tripulantes, entre marinos y estudiantes, rusos, franceses y un griego.

Se trata de una réplica de la fragata de la armada imperial rusa y contemplar nos lleva a viajar a los tiempos del zar Pedro el Grande (1672-1725).

Dentro del barco huele a salitre y a "borscht" (sopa rusa). Con seis chicas a bordo y un joven con deje romántico que viste con calzas holgadas que recuerda aquellos marineros de época o bien un  autentica pirata de los mares.

La goleta, tanto dentro como fuera, tiene muchos detalles. Encabeza la proa una talla de león que representa al zar Pedro I y en la popa, en el despacho del capitán, un mural en relieve donde aparece un águila con dos cabezas. Destaca también en la ornamentación las cientos de cuerdas que suben al cielo.

A principios del siglo XVIII Rusia consiguió uno de sus principales botines de la Guerra con Suecia: el acceso al mar Báltico. En la desembocadura del río Neva fue fundada la ciudad de San Petersburgo, la futura capital del imperio.
En 1703, en el astillero de Olonets por orden del zar Pedro el Grande, fue botada la primera fragata de la flota del Báltico, el "Shtandart”. Su primer capitán fue Pedro I en persona.
El buque de guerra recibió su nombre en honor al estandarte imperial. Antes de 1701 éste mostraba un águila sosteniendo en sus garras los mapas de los tres mares a los que Rusia tenía acceso (el de Azov, el Negro y el Blanco). Tras la adquisición del Báltico se añadió el cuarto.
La gran Guerra del Norte (1700–21), durante la cual se construyó el "Shtandart" duró 18 años más tras su botadura. El Shtandart tomó parte en acciones militares hasta el año 1719 cuando fue dado de baja. Tras esta, Pedro I promulgó un edicto de conservación del “Primogénito de la flota” (cómo él lo denominó) en calidad de monumento a la industria naval rusa.
Desgraciadamente, sin cuidados ni atención, el "Shtandart" y otros barcos atracados en el canal de Kronwerk se deterioraron muy rápidamente.
En 1727, una comisión enviada por Catalina I revisó el estado del buque y decidió llevarlo al dique seco para ser restaurado. Pero el tiempo y el agua ya habían deteriorado tanto el casco que durante los intentos de elevarlo, el cable cortó el casco en varias secciones. El viejo Shtandart fue desguazado y un nuevo decreto fue promulgado por la emperatriz: "En honor a su nombre dado por su majestad Pedro I se construirá un nuevo"
Pero esa orden sólo seria ejecutada casi 300 años después…
La construcción de la fragata réplica Shtandart es la historia de la realización de un sueño, un símbolo de determinación y de compromiso con unos objetivos.
Reconstruir una réplica del famoso buque de Pedro el Grande fue posible gracias a la energía y resolución de una nueva generación. Es la prueba de que nada es imposible si estás dispuesto a ello. En 1994 un grupo de entusiastas de San Peterburgo comenzó la construcción. Los diseños del barco fueron recreados a partir de diversas fuentes.
La fragata se divide en dos áreas: la parte histórica (las cubiertas) y la moderna (la bodega). Pañoles para barriles de agua, cabos para las anclas, balas de cañones y pólvora alojan ahora el necesario equipo moderno (dos motores diesel, bombas de agua, tanques, etc), el comedor, la cocina y  los alojamientos de la tripulación. Todo aquello por encima de la cubierta principal es fiel a los diseños originales: Mástiles y masteleros, jarcia, cabrestante, cañones, la madera tallada y el timón.
Se combinaron métodos antiguos de construcción naval con las más modernas tecnologías. Mucho tuvo que ser aprendido y descifrado en el lugar, intentando pensar como los carpinteros de ribera del siglo XVIII. Otras técnicas se aprendieron en libros de la época y acudiendo a diferentes archivos.
El equipo se componía por excelentes personas. El grupo de entusiastas se convirtió en un equipo unido por objetivos comunes capaces de realizar las tareas menos pensadas.
El 4 de septiembre de 1999 El renacido Shtandart fue bautizado. Su viaje inaugural fue en el verano del año 2000 haciendo la ruta de la Gran Embajada, llevada a cabo 300 años antes, viajando por aquellos países y ciudades donde el joven emperador Pedro I se instruyó en la construcción de barcos para crear la nueva Rusia fuerte.
Fue Pedro I quien inicio su revolución para occidentalizar su atrasado imperio, reformando cada elemento de la nación. Y el 24 de abril de 1703, en la región de Olonets, se puso la quilla del que se convertiría en el primer buque de la flota del Báltico: la fragata "Shtandart".
Al igual que muchos de los futuros buques de su armada. Pedro no solo participó en la fase de diseño sino también en la construcción como un carpintero más. Hecho que seguramente su presencia propició que la nave fuera terminada en sólo cinco meses.
El buque fue una amalgama de los conocimientos que adquirió el gobernante ruso en Holanda e Inglaterra. Poseía un casco de doble fondo similar a los buques neerlandeses del periodo y el velamen era un aparejo como el empleado en los navíos ingleses.
El 22 de agosto de 1703, fue botado y el 8 de septiembre del mismo año fue comisionado como buque de la armada imperial rusa con el "capitán" Peter Mijhailov al mando; es decir el mismo soberano.
En la campaña de Azov, ya había empleado buques, pero sólo eran galeras que operaban como una extensión del ejército de tierra; ahora poseía una nave capaz de operar independientemente en mar abierto.
Pedro en persona capitaneó la "Shtandar" hasta San Petersburgo en su viaje inaugural. Una leyenda cuenta que el Zar colocó una brújula de tal forma que desde su litera podía comprobar el rumbo de la nave.
Las hazañas de la fragata empezaron en 1705, cuando fue destinada a Kronstardt para defender la nueva capital con motivo de la reanudación de las hostilidades contra Suecia en el marco la gran guerra del norte. Por entonces el imperio sueco era la potencia predominante en el Báltico y una espina que Pedro tenía que quitarse si quería cumplir su sueño de una Rusia poderosa.
* Del 16 al 21 de junio de 1705 participó en la flota del vicealmirante de origen holandés Cornelius Cruys en repelar un ataque de la marina sueca en la isla de Kotlin.
* En 1709 con el fin de la hostilidades el buque se hallaba en mal estado debido a la larga exposición al mar, por lo que fue trasladada al astillero.
* En 1710 se le añaden cuatro cañones más aumentando su porte de 24 a 28 cañones.
* El 15 de julio de 1711 fue reincorporada en la base de Kronstadt.
* Entre 1712 y 1713 estuvo destinada en el fuerte de Krasnaya Gorka y navegó por las islas de los Abedules.
* En 1714, no salió a navegar.
* En 1725 por orden de la Junta del Almirantazgo la fragata "Shtandart" fue traslada al puerto de Kronverksky, donde permaneció varada. Este mismo año murió Pedro el Grande, aunque dio instrucciones de que se preservase lo que él consideraba como el "primogénito de su flota".
* En 1727 Catalina I, sucesora de Pedro, ordenó un estudio del estado de la fragata. La idea original era preservarlo como recuerdo del primer buque de la flota del Báltico, pero debido al mal estado de sus maderas, no fue posible y la Shtandart dejó de existir en 1730. Catalina ordenó que se construyera otra fragata idéntica, pero el edicto nunca se llegó a cumplir, si bien su nombre fue empleado por distintas embarcaciones hasta la caída de la monarquía incluyendo el yate del Zar Nicolás II.
En 1994 un grupo de aficionados a la vela dirigidos por el graduado en la Universidad Técnica Estatal de Marina de San Petersburgo Vladimir Martus, tomaron el cometido que Catalina I había dejado hacia 264 años y se propusieron construir una réplica de la mítica fragata, tal y como han hecho también en Francia con la fragata Hermione.
El 4 de noviembre de 1994 se iniciaron las construcciones, aun que la tarea no fue fácil ya que no se conservaban los planos y por lo tanto estos entusiastas de la época de la vela se tuvieron que valer de los dibujos y descripciones existentes del barco.
Durante todo el proceso de construcción se emplearon las técnicas tradicionales de tratar las maderas para su adecuación a la forma del casco, usando madera de roble maciza y los revestimientos de alerce, tal y como su soberano había hecho en el pasado.
Pero se le tuvieron que incluir elementos de seguridad para poder cumplir con la legislación naval; como un motor y una radio. Dividiendo así la fragata en dos partes la "histórica" hecha con el máximo rigor histórico y la "moderna" que queda oculta bajo la bodega; una excelente metáfora de fusión entre lo nuevo y lo antiguo para recuperar un "tesoro" del pasado.
El 30 de mayo de 1988 su casco estaba listo y ante el Vladimir Yakovlev (gobernador de San Petersburgo) y el príncipe Andrés (duque de York y oficial de la Royal Navy) se le dio oficialmente el nombre de SHTANDART.
Finalmente el 4 de septiembre de 1999, doscientos noventa y seis años después de la primera fragata y ante un público de 40.000 personas, la fragata Shtandart regresaba para volver a surcar los mares. Siguiendo los pasos de sus ancestros solo les quedaba montar los mástiles y aparejos.
En junio del 2000, la Shtandart realizó su viaje inaugural por las ciudades que el Zar Pedro recorrió durante su Gran Embajada. Desde entonces no ha parado de navegar por el Báltico, participando entre 2005-2009 en el festival ruso de las velas escarlata (en motivo de la novela de Alexander Grin) y solo a principios de 2012 vistió 54 puertos de 12 países europeos distintos.
También el buque dispone de su currículo audiovisual, habiendo aparecido en varios reportajes y películas como "El servidor del soberano" (2007), "Nova Zembla" (2011), "Michael de Ruyter" (2015), aparte de participar en otros eventos y regatas. Después de diez años acumuló el hito de haber navegado alrededor de 55.000 millas náuticas; aunque topando con la estricta burocracia rusa.


Ha sido una sorpresa la visita de esta fragata en Santander y una maravilla poder verla, aunque la pena fue verla ya con las velas desplegadas pero alta mar, siendo imposible conseguir una foto por encontrarse a gran distancia del objetivo.