LAS
OLAS
LA
COMPETICION
El
día 21, se celebró la X edición de la Vaca Gigante, en el lugar conocido de La Cantera.
El
ganador de esta competición, fue el vasco Indar Unanue, seguido de Nano Riego,
ganador de la anterior edición y el tercero que termino en el podio, fue el
cántabro Nico García.
La
final la disputaron Indar Unanue, Nano Riego, Nicolás, un cántabro que en la
fase de clasificación rompió la tabla al caerse literalmente de un monstruo de
seis metros.
Más
el otro cántabro, Jesus Merodio, el francés
Pierre Rollet y el californiano Nic Lamb.
Otros
surfistas que compitieron fueron Oscar Gómez Ivars; Sannon Mary Click; el
peruano Ricardo Cruzado; el balear Juan Mercader y Asier Puntiverio. Llegaron a
competir 23 riders.
En
un día espléndido y con una mar que preveía olas grandes según se acercaba el mediodía
y el espectáculo empezó a crecer ya metidos en la final.
Este
importante evento que actualmente está considerado como uno de los lugares privilegiado
dentro del panorama internacional de grandes olas.
Por
encima y todos lo da como hecho, son los Gigantes de Nazaré y el Buey de Chile.
En
la final las olas rompieron desordenadas y con mucha espuma lo que dificultaba
a los surfistas para cabalgar en la cresta de alguna ola.
La
organización fue perfecta, más bien un éxito y por destacar que al final se
organizó una recogida de residuos, con premios para los más avezados con la
intención de recoger y mantener limpio un escenario natural y privilegiado como
el que ese día albergó esta competición deportiva.
Coincidiendo
con un día laborable, se reunión un gran gentío de público que como todos los
años disfrutan de un maravilloso espectáculo.
Para
mí es el día que acudo a esta cita, ya son muchos los años que vengo haciéndolo,
no me lo pierdo, para hacer mis fotos y competir con los grandes fotógrafos y
aficionados que con sus cámaras y trípodes se colocan por todo el recinto.
Este
año, he observado varios detalles, uno fue la tabla partida por el medio por
una ola, como una de las moto que perdió el control y fue despedida contra las
rocas, con la suerte de que el motorista fue sacado del agua sin problemas.
El 23 de
marzo, se celebró la IX edición de la Vaca Gigante en las Canteras de Cueto.
Fue
inesperado este acontecimiento, que un día antes tomaron la decisión de aprovechar el momento
preciso que la mar ofrece para un evento de estas circunstancias.
Las previsiones
eran buenas, apuntaban a unas condiciones perfectas para poder elegir el día y
la hora de las 14:00 h. cuando la marea y la naturaleza del mar cumpliese con
los pronósticos.
Yo vengo
asistiendo todos los años y este, le consideraba perdido dado las fechas y que
no llegaba el momento, pero inesperadamente me llegó la noticia de un día para
otro.
La cita
arrancó con la fases previas con siete participantes en la primera tanda y
seguida de tres mangas de seis riders cada una.
Este año se
ha podido ver a un rider local quedar campeón, dando un gran espectáculo sobre
la tabla, gracias a su conocimiento de la ola y en una final con olas de más de
seis metros.
La Vaca
Gigante ya se ha convertido en unos de los campeonatos de olas gigantes más
importantes de España.
Un viento de
suroeste, que al principio ropia mucho más de cerca de la orilla, con la
consiguiente peligrosidad que eso implicaba y cuyas olas alcanzaba algo más de
los cuatro metros.
Luego la mar
cambió bruscamente y los surfistas tardaron en crestear las olas, no
encontraban el lugar ni el modo de subirse a ellas.
Al final la
mar se animó y aparecieron olas de más de cinco metros, para disfrutar tanto
los surfistas como los espectadores.
En la
tercera y última manga, justo cuando el suroeste le dio testigo al viento
gallego, más incómodo, frio y molesto para los competidores, redujo las
posibilidades a los surfistas y más aún cuando las olas se acercaban a la playa
y con ello el peligro.
En la manga
final, cuando las olas acompañaron, al estar la mar con la pleamar casi al
límite, la mar ofrecería lo mejor de la tarde y la verdadera Vaca Gigante
apareció más que nunca cuando el campeonato se terminaba, con la victoria del
surfista cántabro Nano Riego.
Ya son
muchos los años, que asisto a este evento deportivo, para disfrutar del entorno
como es la Cantera de Cueto, lugar privilegiado para contemplar grandes olas.
Pero el
objetivo principal, era poder hacer esas fotos tan espectaculares de los
surfistas con las olas.
No es fácil,
por los inconvenientes que existe, hay que reconocer que se necesita objetivos
largos, más bien, larguísimos, al menos de 1.000 mm., o mejor como ese
fotógrafo que lo hace a unos metros de los surfistas debajo de la ola, me
supongo que utilizaría un objetivo corto, con 14-24 mm. suficiente.
LA COMPETICION
LAS OLAS
El día 13 de
enero, estuve presenciando la nueva edición de este campeonato de surf de olas
gigantes.
Tras tres
años sin poder realizar esta competición por el Covid, ha vuelto de nuevo a
realizarse en un día espléndido en la conocida zona de La Cantera, en Cueto
(Santander).
Fue un
maravilloso día de sol, con viento suave y olas entre los 6 a 8 metros,
suficiente para poder competir.
Aunque las
primeras horas y especialmente en la pleamar, las olas eran complicadas y con
una mar de mucha energía, pero según fueron transcurriendo las horas ya
existían las olas adecuadas para surfear.
Participaron
20 riders, entre ellos 10 surfistas cántabras y el resto procedentes del País
Vasco, Asturias, Galicia, Portugal, Francia e Italia.
El francés
Stephane Iralour, recibió el premio al mejor wipeout, al sufrir varias caídas;
el vasco Axi Muniain se llevó el galardón a la ola más alta de la jornada (8
metros); Juan Merodio fue el cántabro mejor clasificado; y el vasco Natxo
González fue el ganador del campeonato con dos olas puntuadas con algo más de 9
y un 10 que el llevo al triunfo final.
El segundo
clasificado fue Xabi López y el tercero Axi Muniain.
Con esta
victoria de Natxo González se convirtió en el primer sufista con dos victorias
en La Vaca y consiguió los 3.000 euros del prize money y una plaza para
competir en El Buey Santos del Mar en Chile, evento con el evento santanderino
estrena hermanamiento en esta edición.
Hubo cerca
de miles de personas que se habían acercado a disfrutar con el espectáculo.
No suelo
perderme ningún año y como siempre allí estuve con mi cámara para poder
conseguir las mejores imágenes.
Por mi
experiencia, debo decir que es difícil conseguirlo, todos sabemos que los
surfistas se encuentran muy lejos y para ello se necesitaría objetivos muy
largos, mínimo 600 mm. o bien tener acreditación de la organización para
situarte en la zona elegida para la prensa, lugar excelente para poder tener
una perspectiva idónea de la ola y el surfista.
Hasta el
próximo año.