Estábamos pendientes de la visita al
Zoo de Santillana del Mar y habíamos
decidido ir este 23 de Octubre.
Nuestro objetivo eran las mariposas,
aunque no era el momento ideal para "visitarlas", las fechas idóneas
son en primavera y verano.
Es el Jardín Tropical, donde se
concentran en un sorprendente espacio lleno de flores y vegetación, con cientos
de mariposas tropicales de origen americano y asiático, de más de 20 especies
diferentes, que vuelan entre el público y en un ambiente con sonidos de
naturaleza que proporciona una sensación de relax extraordinaria.
Aunque es importante conocerlo, al
encontrarnos en un ambiente húmedo especial, que se necesita para la
conservación de las mariposas.
Es un lugar pequeño repleto de
mariposas, pero de constante labor, para que en poco tiempo se vea un nuevo ejemplar que
despliega sus alas y que inician su vuelo por primera vez.
Hemos estado toda la mañana en el
interior del Jardín, para practicar y fotografiar en "macro" a estos
maravillosos invertebrados.
Al mismo tiempo, el propietario José
Ignacio, nos ha dado una pequeña clase del desarrollo de las orugas, que nos ha dejado interesados por
su explicación.
Cuando una oruga ha crecido por
completo segrega una gran cantidad de líquido de sus glándulas, llamadas
hiladeras, que se localizan debajo de su boca. El líquido se endurece formando
una seda parecida a un hilo que la oruga usa para amarrar su extremo trasero a
una rama u hoja. La oruga enreda el hilo de seda alrededor de su cuerpo para
crear una cubierta. Esta carpa exterior se endurece para formar un cascarón
llamado crisálida.
Dentro del capullo, la oruga cambia
para volverse una pupa. En un proceso llamado histólisis, la oruga se digiere a
sí misma desde adentro hacia afuera, ocasionando que su cuerpo muera. Durante esta muerte
parcial algunos de los antiguos tejidos de la oruga son rescatados para formar
nuevos. Estas células remanentes son llamadas histoblastos y se usan para crear
un nuevo cuerpo. Empleando los jugos de su sistema digestivo, la oruga
transforma su anterior organismo de larva en alimento que usa para reconstruir
su nuevo cuerpo.
El proceso de transformación de la oruga
a mariposa, pasa por la fase de la crisálida. La crisálida es conocida como el
proceso en que la oruga se hace capullo..!! Esa es la crisálida!!
La crisálida es una de las cuatro
etapas de la metamorfosis de la oruga en mariposa, sin duda la más importante.
Cuando la oruga alcanza su pleno potencial de crecimiento teje una especie de
alfombra de seda sobre una hoja o rama. Se suspende a sí misma, retuerce su
cuerpo y permanece boca abajo e inanimada dando lugar a la crisálida. La
mayoría de las especies de oruga tarda entre siete y catorce días en lograr la
transformación en mariposa y algunas pueden tardar hasta un año. Una vez que la
metamorfosis se produce con éxito, en la crisálida se abre una pequeña grieta y
empieza a emerger la mariposa. Ésta se aferra a la cáscara de la crisálida
rota, las alas arrugadas se secan y comienzan a desplegarse, a la vez que la
sangre del insecto -hemolinfa- fluye por todo su cuerpo y se prepara para el
vuelo. El proceso tarda alrededor de una hora y luego la mariposa puede volar.
Nosotros hemos tenido la suerte de
estar presentes en este momento que la mariposa inicia su primer vuelo. ¡Impresionante!
Esta visita ha sido más bien educativa, además
de estar disparando a toda mariposa que se posase.
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